Una población
con encanto

Ven, relájate, desconecta y disfruta del entorno rural.
Un pueblo con mucho que contar
HERRAMÉLLURI

Historia

En Herramélluri han existido asentamientos celtas, berones y romanos, siendo, según una hipótesis no demostrada, «zona de vasconización tardía» donde no se hallan restos prerromanos vascones.

Los romanos conquistaron el asentamiento primitivo, denominado Oliva –existe una hipótesis que indica su origen no celtíbero y que los berones fueron uno de los pueblos que migró de centro Europa asentándose en las riberas del Ebro, pese a ello los restos arqueológicos hallados coinciden en la mayoría de los casos con aquellos hallados en otras zonas inequívocamente celtíberas–,4 en torno al año 178 a. C. y le dieron el nombre de Libia. Según el lingüista Koldo Mitxelena, padre de la filología vasca, y cuya teoría avalaba en cierta medida el etnógrafo Julio Caro Baroja, los berones serían de etnia vasca con mezcla de celtíberos, pero hablarían euskera y poseerían también rasgos culturales tomados de los celtas. Está situado en el término de Las Sernas, lugar de fácil defensa, ya que estaba en lo alto del cerro del Piquillo y en la confluencia de los ríos Tirón y Reláchigo.

El pretor romano Tiberio Sempronio Graco fue el encargado de reducir las ciudades conjuradas contra el poder de Roma, una de las cuales parece que fue Oliva. Una vez conquistada, se acuñó la moneda romana para pagar tributos a Roma. Durante las guerras civiles, Libia fue fiel a Pompeyo.

Herramélluri está ubicado cerca del yacimiento arqueológico de la antigua ciudad de Libia. Se han encontrado restos de la época anterior a Cristo. El hallazgo más importante se produjo en 1905, cuando se encontró la Venus de Herramélluri, actualmente en el Palacio Provincial.

Paraíso rural
HERRAMÉLLURI &

Historia

Velasco parece que nació también al mismo tiempo que Herramélluri, finales del siglo X o principios del XI. Su origen puede estar relacionado con los Velaz, apareciendo en los primeros documentos aparece como Belascuri.

En el siglo XVII aparece con una sola persona en su corporación municipal como alcalde pedáneo y dependiente del ayuntamiento de Santo Domingo de la Calzada. Sus servicios los prestaban los municipios de Santo Domingo, Grañón, Leiva y Herramélluri. Entonces el Reláchigo sin puente, era el pequeño obstáculo para salvar.

En el año 1812, los primeros días del mes de octubre fueron anormalmente abrasadores, demasiada temperatura para los esfuerzos que exigía la vendimia todos los años. Era el cura Don Antonio Ranedo y Don Francisco Ranedo el alcalde. Ambos, con un porrón en la mano hablan de sucesos como el 2 de mayo en Madrid, las heroicidades de Agustina de Aragón o constitución que están elaborando las Cortes de Cádiz. Todo un lío para la época. Don Francisco Salazar de Gurendez (el XII mayorazgo de la casa grande de Herramélluri) también anda preocupado por lo que ocurre con la casa grande y su ocupación por el general Verrdier. Al final la soldadesca alojada en aquella casa, la noche del 22 de octubre después de cometer varios insultos, ocupan la iglesia apoderándose de y destruyendo varios documentos y algunos de los elementos de la iglesia, constan huellas de dicho acto en los libros de fábrica de la iglesia y documentos de juicios habidos al respecto.

Velasco siempre ha transcurrido de la mano de Herramélluri y su vida han transcurrido paralelas.